DIA OCHENTA – MARTES 2 DE JUNIO
NUESTRA MADRE TIERRA
Hoy he escuchado de nuevo las risas de los niños en la playa. Un jolgorio auténtico como hacía meses no escuchaba y me ha llenado de alegría. Desde que comenzó el confinamiento he disfrutado como nunca del canto de los pájaros, del vaivén de las olas y también de las ranas que parece haber triplicado su población en el río que tenemos al lado. Unos sonidos maravillosos, pero a medida que pasaban las semanas echaba en falta, no el griterío de los adultos, pero si las risas de los niños. ¡Porque si no hay niños a nuestro alrededor no hay futuro!
Pero en este martes han estado ahí. Bañándose, riéndose, con las colchonetas, flotadores y hasta una tabla de surf. Eso significa que el futuro está asegurado. No me aventuro a adivinar como será ese futuro, pero espero que, tras este desastre, los niños de ahora hayan comprendido que no pueden seguir el paso de los adultos jugando con el planeta como si fuera una pelota de futbol a la que le puedes patear como y cuando te dé la gana.
Sin quererlo me sale la vena ecológica con dos noticias aparentemente buenas. Los arrecifes de coral están en peligro de extinción desde hace mucho tiempo debido al calentamiento de la tierra que ha calentado el agua de los mares. Y los corales viven en simbiosis con un alga que es la que le da vida. Pero esta alga no aguanta el calor por lo que se muere dentro del coral que también deja de existir. Es la trágica historia de nuestros mares que tiene muchos más capítulos destructivos, algunos de ellos sin remedio alguno.
Bueno el caso es que hay un grupo de científicos en Australia que trabajan desde hace años para conseguir que esas algas, que alimentan los corales, sean más resistentes al calor y parece que lo han conseguido. Sin duda una buena noticia para los arrecifes, aunque al mismo tiempo hay que decir que los mismos científicos no garantizan que esas algas sean igualmente resistentes a la contaminación o cualquier otro desastre que hemos vertido a los mares.
Una buena noticia a medias, por tanto, a la que añado otra que tiene mejor pinta y que va unida a una de esas palabras raras que tanto me gustan. Prístina/o. A ver, si yo digo que mi bisabuelo era muy prístino o que ese coche es muy prístino ¿alguien sabe de lo que hablo? Yo desde luego no por lo que eché mano, como hago siempre, de hecho es mi libro de cabecera, del diccionario de la RAE. No sabría vivir sin ese libro. En uno de mis últimos cumpleaños me preguntaron que qué quería y yo apunté a la última edición del DICCIONARIO, con mayúsculas.
El caso es que un equipo de investigadores ha descubierto en el Océano Austral una zona donde el aire es prístino. Esto significa antiguo, primero, primitivo u original, o sea, el de toda la vida. Eso significa que ese aire es de cuando no había contaminación por lo que está libre de partículas que pueden haber llegado de cualquier parte del mundo y que en muchos casos se debe a las manos destructoras del ser humano. El estudio señala muchas más cosas, pero podemos resumirlo diciendo que es el lugar con el aire más limpio de la tierra. ¡Igual lo respiramos y nos intoxicamos ya que estamos tan acostumbrados a la contaminación!
Estamos en Fase 2 y el gobierno se ha asegurado una nueva prórroga del Estado de Alarma con lo que nuestros movimientos seguirán siendo limitados durante otras dos semanas.
¿Por cierto, alguien sabe si abrió el Cine Roma? He visto en su página web que hay dos películas en cartel, pero no estoy segura si es de ahora o de "antes". Creo que a partir de este momento habrá siempre un antes y después de.
El caso es que sigo sin poder ir a ningún sitio. A ninguno donde realmente quiera ir. Tengo la alegría de vivir en este preciso lugar, pero la pena de tener a todos los míos muy lejos. En otras provincias, comunidades y hasta en otros países. Y no ver a los tuyos, y a algunos no los veré hasta el año que viene, se hace muy cuesta arriba.
A ver que nos espera mañana miércoles. Yo de momento a mis ejercicios y a terminar el bricolaje empezado hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario